Nadie se encuentra exento del pago de deudas (yo me incluyo), y menos cuando existen períodos de recesión o disminución del empleo y de las oportunidades de trabajo.
Pero lo que nunca debes perder es el control de tus finanzas, el seguimiento a las mismas, su análisis y desarrollo de estrategias para que consigas en un plazo prudencial quedar libre de deudas.
Aún en los momentos más difíciles, en donde te deseas declarar en la quiebra financiera, debes actuar en forma Seguir leyendo